Todavía existen muchas dudas sobre qué material es el más adecuado para pasear con nuestros perros: collar o arnés. No es raro escuchar que el collar es mejor, pues evita que los perros tiren, pero ¿es eso cierto?
Antes de entrar a hablar sobre esto, nos gustaría plantearos una cuestión: ¿habéis visto alguna vez a un niño pequeño con uno de esos sistemas de seguridad que los llevan atados para que no puedan salir corriendo? Es algo que genera mucha controversia, ya que hay personas que creen que es algo humillante para el niño, mientras que otras consideran que la seguridad del pequeño está por encima de todo. A pesar de toda esta discusión, lo que todos tenemos claro es que ese mismo sistema agarrado al cuello del niño es intolerable, ¿por qué sin embargo sí lo hacemos así con los perros?
Nuestros perros deben llevar correa, es una cuestión de seguridad y convivencia en zonas urbanas. Pero la correa no debería ser más que eso: una herramienta de seguridad, no de manejo de nuestros perros.
Para que un perro no tire no necesita un collar, necesita que se le enseñe (y para esto no son necesarias las correcciones) que el paseo es más agradable para todos si no hay tensión de correa.
Sabemos lo importante que es estar bien a nivel muscular, pues el acumular contracturas aumenta nuestra sensación de malestar y disminuye nuestra calidad de vida. Por ese motivo vamos al fisioterapeuta, cuidamos las sillas en las que nos sentamos y tratamos de corregir nuestra postura corporal. Pero… ¿qué pasa con nuestros perros?
Por suerte, cada vez es más normal llevar a los perros a veterinarios-fisioterapeutas cuando tienen alguna lesión. Lo que todavía no sabemos es que gran parte de las lesiones que acumulan se deben al collar: problemas cervicales, problemas musculares e incluso oculares, como podéis leer aquí http://1stsat.cynod.com/CollarsandEyeIssues.pdf.
También, una tensión de correa permanente que vaya directamente al cuello afecta a la postura, lo que si se mantiene en el tiempo da lugar a problemas en la marcha y posturales.
Anders Hallgren explica en su libro “Problemas de espalda en los perros, la causa subyacente de los problemas de comportamiento”, que todas esas lesiones y ese dolor que se puede producir en nuestros perros por el uso de collares, en muchas ocasiones están asociados también a problemas de comportamiento.
En otras ocasiones, aunque no sean la causa primera del problema de comportamiento, pueden ayudar a empeorarlo. Por ejemplo, un perro que tira de la correa y ladra cuando ve a otro perro, si va agarrado con un collar, esos tirones le generarán un malestar que muy fácilmente asociará con la presencia del otro perro, favoreciendo que los encuentros sean cada vez más difíciles de gestionar para él.
Por todo lo anterior, lo mejor que podemos hacer por y para nuestros perros es llevarlos con un buen arnés. En IntegranDog solemos recomendar los llamados en forma de Y como el que os mostramos en la foto.
Por último, pero no menos importante, explicaros que tal y como podéis observar en las fotos de Dolly con su arnés en forma de Y, ella lleva un collar puesto. ¿Y por qué lleva un collar si durante todo el artículo hemos hablado de que preferimos arnés antes que collar? Pues la explicación es muy sencilla. Dolly es una perra a la que le encanta hacer la croqueta por el campo y además meterse en el agua, por lo que para que se sienta más libre (y que no rompa en dos días el arnes 😉 ), cuando la dejamos correr por el campo le quitamos su arnés, pero siempre lleva ese collar con la chapa identificativa.
El collar lo usamos sólo en ese caso, jamás para atar la correa y pasear.
Esperamos haberos solventado las dudas de por qué es más aconsejable el uso de arnés y no de collares en perros.
Marta Arroyo e Izaskun Ibáñez – Integrandog
Desde dogminancia.com, queremos dar las gracias de nuevo a Marta e Izaskun por compartir sus conocimientos, que son muchos, con nosotros. Esperamos que os haya gustado esta entrada y que os hayan dejado con ganas de que llegue pronto la próxima, igual que nos ha pasado a nosotros. Mientras tanto, si queréis saber mas sobre ellas, queréis acudir a sus cursos o contratar alguno de sus servicios, podéis visitar su página web www.integrandog.com.
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En Hoope siguen necesitando ayuda, ya que son muchos mas los perros abandonados que necesitan su ayuda que los que son acogidos o adoptados:
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